Al poder de las palabras y a la comunicación le debo mucho en mi vida. Desde pequeña, la escritura ha sido una parte esencial en mi desarrollo. Recuerdo la ilusión con la que escribía cuentos de ficción y cómo llenaba diarios con pensamientos, ideas y reflexiones. Su trascendencia fue tan grande que, desde la adolescencia, esto me ayudó a canalizar emociones y a afrontar diferentes situaciones vitales, junto con reconocimientos y logros, tanto académicos como personales. Por este motivo, y algún que otro más, he estudiado un grado en Periodismo en la Universidad de Santiago de Compostela. Una titulación sobre la que me gustaría revelar que he luchado por conseguir, no sólo por mí, si no también por mi abuelo materno fallecido, quien me ha enseñado el valor del esfuerzo y gracias a quien aprendí a ser ambiciosa, constante e inconformista.

Con todo, al terminar la carrera, me di cuenta de que no estaba siendo fácil descubrir mi lugar en el ámbito profesional. A menudo, nos encontramos en encrucijadas, pero el tiempo pone a cada uno en su camino y la vida nos va llevando hacia aquellos sitios que nos pertenecen. Y así fue como a mí me trasladó, hace un año, a un departamento de marketing de una empresa B2B, con la tarea principal de generar contenido sobre la compañía y su sector. Gracias a este trabajo, pude explorar y conocer de cerca una pequeña parte de todo lo que el sector del marketing engloba, lo que propició que, actualmente, esté cursando un Máster en Marketing Digital y Gestión Comercial en la Universidad de Santiago de Compostela.